DURMIENDO CON EL ENEMIGO
La noticia sobre la muerte de una joven madre y su menor hijo acuchillado por su pareja en el Cuzco, pone una vez más en el tapete aquella extraña combinación de amor y odio entre un hombre y una mujer que alguna vez se juraron amor eterno. Y la gran interrogante es que está pasando en el mundo porque cada vez más son frecuentes los casos de crímenes perpetrados entre esposos, siendo los más perjudicados los niños que nunca comprenderá porque su padre mató a su madre o viceversa. Sin duda el trauma que pueden generar en sus inocentes hijos será de por vida. Según los psicólogos, las diferencias empiezan con agresiones verbales y luego se transforman en físicas. Si uno de ellos no frena a tiempo la agresión ésta se tornará cada vez más violenta. Callar por vergüenza o por el qué dirán sólo aumentará el riesgo. La decisión está en nuestras manos.