¿CUÁLES SON LOS MÉRITOS DE DON GOYO?
¿Qué ha hecho don Gregorio Santos para que
los peruanos lo consideremos como un virtual candidato a la Presidencia del Perú?.
Acaso será un líder regional que destaca entre
sus similares por su visión de desarrollo, acaso será un presidente exitoso que
ha puesto en un lugar previlegiado a Cajamarca o acaso será una autoridad
regional que gasta eficientemente y con transparencia los recursos del Estado.
Ninguna de las anteriores. Don Goyo como le
llaman sus allegados, sólo tiene sus cinco minutos de fama mediática por
oponerse al proyecto Minero Conga de la poderosa Yanacocha.
Don Goyo ni siquiera podría calificar como
un personaje que lucha y defiende el agua en su natal Cajamarca. Don Goyo sólo
es un revoltoso que ha ocasionado millones de pérdidas económicas a su región
por liderar un violento paro que puso en jaque al torpe Gobierno de Ollanta
Humala.
El desubicado presidente regional de
Cajamarca piensa que por haber captado la atención de los medios nacionales en
su revuelta antiminera tiene méritos suficientes para ostentar el sillón de
Pizarro.
Don Goyo es bastante iluso e insulta la
inteligencia de los peruanos al creer que tiene opción de llegar a dirigir los
destinos del país. Tal vez pensará “si Toledo con la marcha de los Cuatro Suyos
logró meterse en el bolsillo al electorado peruano”, él también la tendría
papayita para conseguir su ambicioso proyecto político.
Cómo lo decía el desaparecido y siempre
querido productor Guillermo Guille ¡¡¡Qué estaremos pagando!!! para tener a don
Goyo como candidato a la
Presidencia de la República.
Algunos podrían pensar que entre nosotros
nos choleamos y se trataría de una discriminación tachar de antemano al señor Santos Guerrero
como virtual candidato pues dicho sea de paso – todos los peruanos con algunas
excepciones que señala la Ley-
podemos ser potenciales presidentes de la República.
Pero con las disculpas del caso, el señor
Santos primero debería demostrar al país que es un excelente gobernante regional
y ponerse a trabajar por Cajamarca, una de las regiones más pobres sentada en
un “banco de oro”.
Nos preguntamos si don Goyo gasta con
eficiencia y eficacia el altísimo presupuesto asignado a su región por Canon y
si tiene en cartera proyectos de envergadura para mejorar las condiciones de
vida de los cajamarquinos que habitan el área rural.
Sería mejor que don Gregorio pise tierra y baje de su nube, porque más allá de su fama
mediática por revoltoso y agitador, no tiene ningún mérito para soñar con ocupar
el sillón presidencial que a todas luces le quedaría grandísimo.
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