HOY NO ME QUEJARÉ



Hoy no me quejaré del calor infernal, de las pistas anegadas, de la basura dispersa en las esquinas, del colapso de los desagües y los olores fétidos que contaminan el ambiente, de las veredas rotas y de la insensatez e indolencia municipal.

Hoy no me quejaré del caos en el transporte público, de los baches que nos dejan sin riñones, del abuso de los conductores que suben las tarifas a su antojo, de las calles bloqueadas por las mangueras de las motobombas que evacuan las aguas empozadas y de la intolerancia de la gente.

Hoy no me quejaré de la restricción del agua potable, de la suspensión temporal del ascensor, de la caminata agobiante por las escaleras que me conduce al octavo piso y de la indiferencia de los vecinos que golpean las mamparas sin respeto a las áreas comunes.

Hoy no me quejaré de la presencia de las mariposas plomizas que invaden las paredes de la puerta principal del condominio, del agua que filtra por las ranuras de mi ventana, de las paredes humedecidas y el piso laminado levantado por el agua.

Y no lo haré por las miles de familias que han quedado literalmente en la calle a causa de las inundaciones, huaicos y fuertes lluvias que azotan al país, por los moradores que llevan días sin agua potable y por el sufrimiento de los deudos cuyos familiares parecieron entre las aguas desbordadas.

No lo haré por los damnificados de Illimo, Pacora, Jayanca, Oyotún, Zaña, Inkawasi, Lambayeque, Chiclayo y Ferreñafe que han visto impotentes como sus viviendas se derrumbaron en segundos cual castillo de naipes, y hoy viven encargados en la casa de algún familiar o han ocupado los albergues temporales instalados por los municipios.

No lo haré en nombre de la valiente y tenaz Evangelina que sorprendió al mundo al emerger entre palos y lodo retando a la misma muerte y demostrando ante cámaras que los milagros si existen, luego de ser arrastrada por un huaico cuando realizaba sus actividades domésticas, convirtiéndose en el símbolo de la resistencia peruana.

No lo haré por los vecinos trujillanos que por sexta vez han soportado la ferocidad de los deslizamientos de agua, lodo y palos en pleno centro de la ciudad, por las inundaciones de las casonas coloniales de majestuosas ventanas y su histórica Plaza de Armas.

Parafraseando la obra literaria de Julio Ramón Ribeyro al Pie del Acantilado “el mar da, el mar quita”, podríamos decir “la naturaleza da y la naturaleza quita”, durante semanas hemos visto como la naturaleza nos golpea furiosamente, y ayer por fin, nos mostró su rostro amable: un gigantesco arcoiris; y, horas más tarde, un cielo estrellado, devolviéndonos la esperanza de una nueva alianza de paz y armonía.

Ojalá que al fin tomemos conciencia de la necesidad de cuidar y proteger el planeta que nos cobija.

Hoy no me quejaré por nada, pero mañana cuando cesen las lluvias, los ciudadanos tenemos la obligación de darle un nuevo giro a nuestras vidas de cara a la planificación, prevención y conciencia ambiental.

Comentarios

  1. Tienes toda la razón, hoy no me quejaré, pero desde hoy cuidaré más el agua, la naturaleza, recogeré el papel que alguien tiró al piso, me asombraré y agradeceré por el sol, la luna, las estrellas, el frio, el calor, la tierra, la lluvia y por todo lo creado.
    "Vio Dios cuanto había hecho, y todo estaba muy bien. Y atardecío y amaneció: día sexto."
    Génesis 1

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    1. Mensaje bíblico que hemos olvidado. Sabes, la naturaleza nos está devolviendo el daño que le hemos ocasionado.

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  2. Donde haya un árbol que plantar, plántalo tú. Donde haya un error que enmendar, enmiéndalo tú. Donde haya un esfuerzo que todos esquivan, hazlo tú. Sé tú el que aparta la piedra del camino.....así seremos grandes, no hay que olvidar que sin crisis no hay éxito.

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    1. El cambio empieza por nosotros mismos, dejemos de ver la pelusa en el ojo ajeno.

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  3. Yo no me quejare,por los ya mencionados y ademas Por los damnificados en Piura y sus distritos ,así como los hermanos de Tumbes . por todos aquellos q siguen dando la lucha sin rendirse y q a pesar de todo lo malo siguen apoyando a sus hermanos en desgracia.

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  4. Con las últimas lluvias la situación de Piura y Tumbes se ha agravado, hay muchos peruanos sin techo y sin comida, ayudemos en lo que esté a nuestro alcance y oremos por ellos...

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  5. No es momento de quejarnos sino de actuar.Es momento de tomar cociencia que tenemos la obligacion de cuidar la naturalez y el medio ambiente qye nos cobija.Es la creacion de Dios .
    No debemos ensuciar
    No debemos invadir el cauce de rios y quebradas
    No debemos contaminar
    Este embate de la natyraleza que nos sirva de leccion y ojala recapacitemos en Cuidar lo que Dios nos a entregado.

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