EL ETERNO HOMBRE ARAÑA

“Un gran poder, demanda una gran responsabilidad” célebre frase del Hombre Araña el comic que llegó a la pantalla gigante conquistando el corazón de millones de cinéfilos que admiran la inocencia y a su vez su audacia y valentía de Peter, un joven común y corriente que se convierte en superhéroe por la picadura de un arácnido. La historia es fantástica, y por más que la TV cable la repite hasta el cansancio, por lo menos a mí, no me aburre por el contrario me vuelvo a enganchar por la agilidad con que se desarrolla la trama de lucha con villanos y la tierna historia de amor con la angelical Mary Jane. Las películas del hombre araña combinan muy bien la acción, el drama y el romanticismo. Pero el final siempre se queda la desazón del amor trunco, sacrificado y hasta inmolado. Las tres versiones interpretadas por el actor Tobey Maguire nos dejó la imagen de un Peter inocente, angelical y hasta tímido. Pero lo más resaltante de las tres películas es el mensaje y la mezcla de estas dos palabras “poder” y “responsabilidad” que ojalá pudieran imitar en la vida real nuestra clase política.