¿Y LOS CAS?, “NO SE OYE PADRE”

Parece que el debate del proyecto de ley que elimina los contratos por administración de servicio (CAS) de los trabajadores del sector público, es una papa bastante caliente, razón por la cual, los padres de la patria vienen postergándolo sin ninguna justificación pese a que se encuentra en agenda desde hace varios días para ser abordado en la actual legislatura. En el Perú son más de 113 mil personas las que laboran bajo este sistema laboral abusivo que sólo otorga 15 días de vacaciones cuando los demás trabajadores tienen derecho a descanso remunerado por 30 días. Los CAS no perciben Compensación por Tiempo de Servicio (CTS), ni escolaridad, gratificaciones por fiestas patrias o navidad, canastas, uniformes, entre otros beneficios adicionales, de los que gozan los trabajadores estatales en condición de nombrados. Lo peor de todo, no tienen estabilidad laboral. Su empleador sólo está obligado a comunicarle con algunos días de anticipación que su contrato no será renovado sin importar los años que llevan en la institución. Es cuestionable, por decir lo menos, la falta de sensibilidad de los legisladores peruanos quienes pese a que sabían que se venían despidos masivos en el mes de diciembre, no movieron ni un músculo de su cuerpo para priorizar su debate y por el contrario lo fueron encarpetando hasta prorrogarlo sin fecha conocida, demostrando su total indiferencia con la clase trabajadora. En cristiano, les valió que miles de hogares pasaran la peor Navidad al quedar el jefe o jefa de familia sin empleo, cuando ellos gozan de jugosos sueldos y los mayores beneficios laborales en el país. A la fecha, uno que otro legislador ha mostrado su interés por poner en debate este tema, sin embargo ha quedado sólo en discursos y buenas intenciones. En la presentación del Gabinete en el Congreso no se oyó nada sobre la situación de los CAS, porque según el Premier hay cosas más urgentes que atender en el país como la tan mentada política de inclusión social. Lo cierto es que miles de trabajadores siguen esperando las ganas y el buen humor de los padres de la patria - si es que no se les ocurre mandarnos al carajo- para que definan de una buena vez si eliminan este sistema de contratación en forma inmediata o progresiva, o si le otorgan mayores beneficios. Recordemos que esta clase trabajadora viene siendo maltratada por años, primero con el contrato de Servicios No Personales (SNP) que fue desnaturalizándose con los años – donde el trabajador no tenía derecho absolutamente a nada- y ahora a través de los Contratos por Administración de Servicios (CAS), siendo en ambos casos tratados como trabajadores de segunda clase. El Ejecutivo y el Congreso tienen la palabra, para poner fin a la incertidumbre de un grueso sector de contratados que sólo piden justicia y buen trato a su empleador: el Estado Peruano.